La tesorera de Arizona, Kimberly Yee, ha tomado acciones legales al unirse a una demanda contra la Administración Biden por la creación del Monumento Nacional Baaj Nwaavjo I’tah Kukveni-Huellas Ancestrales del Gran Cañón el año pasado.
Yee, respaldada por el Caucus Republicano del Senado del Estado de Arizona, argumenta que esta designación afectará negativamente la economía estatal al prohibir la minería en un área que alberga unos 3,000 sitios culturales e históricos.
Según Yee, esta medida impactará especialmente en el fondo escolar permanente de Arizona.
El monumento, que cubre 917,618 acres de tierra en el Gran Cañón, ha sido promovido por líderes tribales locales durante años, pero enfrenta oposición por parte de sectores que ven limitada la extracción de recursos naturales, como el uranio.
La denuncia, presentada en el Tribunal de Distrito de Estados Unidos para el Distrito de Arizona, cuestiona las restricciones impuestas por la designación del monumento, calificándola como un “truco publicitario” que afectará la independencia energética del país.
Esta controversia reabre el debate sobre la protección del medio ambiente frente a las necesidades económicas y energéticas de la nación, en un contexto donde la producción nacional de uranio ha disminuido significativamente en las últimas décadas.
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