La economía estadounidense sorprendió positivamente al añadir 353,000 puestos de trabajo en enero, superando ampliamente la estimación del Dow Jones de 185,000, según informó la Oficina de Estadísticas Laborales del Departamento de Trabajo.
La tasa de desempleo se mantuvo en un sólido 3.7%, frente al 3.8% previsto.
Además, los ingresos medios por hora aumentaron un 0.6%, el doble de la estimación mensual, contribuyendo a un aumento anual del 4.5%, superando las expectativas.
El crecimiento del empleo fue generalizado, destacando sectores como servicios profesionales y empresariales con 74,000 empleos, seguido por atención médica (70,000) y comercio minorista (45,000).
A pesar de estos impresionantes datos, las cifras podrían plantear preguntas sobre la posibilidad de recortes de tasas por parte de la Reserva Federal, ya que algunos expertos sugieren que el sólido mercado laboral podría retrasar tales medidas hasta 2024.
Este robusto informe de empleo refleja la resiliencia de la economía estadounidense, aunque plantea interrogantes sobre el curso de las políticas monetarias.
A medida que la Reserva Federal observa de cerca los indicadores económicos, el sólido crecimiento laboral podría influir en sus decisiones futuras, mientras la inflación y la dinámica económica crean un panorama complejo.
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